jueves, 31 de octubre de 2013

El poder de la oración

La oración es el arma más efectiva y también la más sencilla de usar, no te compliques tanto, ora a tu Padre quien obrará a tu favor si se lo pides con humildad y fe. No dudes, aunque te parezca absurdo, ante una situación adversa, busca al Señor en intimidad, esa actitud de total abandono provocará que tu prepotencia muera y renazca la convicción en que todo es posible para Dios.

Jesús nos comparte el secreto de Su ministerio al explicar que la fe y la oración son poderosas. Si oras con fe, lo que pides vendrá. No confíes en tus recursos que son limitados, por lo tanto te limitan, confía en el Señor, ya que esa fe te dará acceso a un mundo ilimitado de oportunidades. Acércate al dueño de cuanto existe, a quien hizo todo de la nada, por lo que puede ayudarte a obrar de la misma forma para que logres maravillas a partir del vacío total. La Palabra es clara en decir que cualquiera que diga y crea le será hecho, no lo dudes, repítelo:

¡Cualquiera, todos lo podemos hacer si tenemos fe!

Deja a un lado el afán, confía en el Señor, quien cuida de ti y te da paz. Jesús le pedía al Padre en todo tiempo, incluso en los momentos más difíciles. Así que no aprenderás a pedir y a vivir sin afán hasta que no descubras que Dios es tu Padre y te ama, por lo que no te negará nada. Creer en la paternidad de Dios es fundamental para nuestra libertad. Si buscamos a nuestro Padre en oración, nos alejamos del pecado, somos libres y nacemos a una nueva vida porque Él guarda nuestro corazón y nuestros pensamientos. Una vida de oración nos mantiene seguros en las manos de Dios.





No hay comentarios.:

Publicar un comentario