martes, 25 de febrero de 2014

¡Haz de tu vida una oración permanente!

Un ejemplo sencillo para utilizar la oración como llave de la mañana es que Cristo sea el primer pensamiento de tu mente, el primer Nombre que pronuncien tus labios y reclame tu corazón. Dale los buenos días, salúdalo, cuéntale lo que vas a hacer a lo largo de tu jornada, invítalo a que te acompañé, conságrale todas tus acciones; si estás por vivir un día intenso pídele su gracia, fuerza y paciencia; pídele que te ayude a asumir cada situación que vivas como Él lo haría.

Pero no esperes a que llegue la noche para retomar la oración y hacer de ella el cerrojo de tu faena. A lo largo del día trata de tener el recuerdo permanente de tu Señor, presta atención a todas las bendiciones que el te regala minuto a minuto en detalles que solo nuestro SEÑOR nos da, háblale, no olvides darle las gracias por todo!!

Y por fin, cuando las luces se apagan en el mundo, cuando llegue la hora del descanso, habla con el Señor cuentale que tal has vivido tu día, qué pudiste hacer y no hiciste, qué hubieses podido hacer mejor, cuánto amaste... Dile que vele tu descanso, que al día siguiente quieres ser mejor y continuar caminando de su mano hasta llegar a estar junto a EL.



1 comentario:

  1. Утреннее возношение молитвы
    ко' Христу, благославляемо
    Богом, для нашего блага...
    аминь

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