viernes, 13 de diciembre de 2013

Toda persona que conoce a Jesús, tiene razones de sobra para hablar de Él por el resto de su vida.


Estaba pensando en qué motivos hay para hablar de Jesús, y de verdad son muchos. Pero ¿Qué tal si nos pusiéramos de acuerdo para todos hablar de él, y hacer que la gente conozca más que sólo su nombre, que lo conozcan a Él personalmente y que sus vidas sean revolucionadas por su presencia y amor en todos los ámbitos y para siempre (eternidad incluida)?
¿Buena idea no?, ¡Pues se le ocurrió a Dios mismo!, y es más, no es una simple recomendación, es un mandamiento. Es la labor de la iglesia de Cristo, es una parte de traer el Reino de Dios a la Tierra, de la gran comisión, de ser sal y luz, de ser hijos.

Que abunde Jesús en nosotros para que podamos hablar de Él, y vivirlo.

Un párrafo para pensar:

...Para que habite Cristo por la fe en vuestros corazones, a fin de que, arraigados y cimentados en amor, seáis plenamente capaces de comprender con todos los santos cuál sea la anchura, la longitud, la profundidad y la altura, y de conocer el amor de Cristo, que excede a todo conocimiento, para que seáis llenos de toda plenitud de Dios. Y aquel que es poderoso para hacer todas las cosas más abundantemente de lo que pedimos o entendemos, según el poder que actúa en nosotros, a él sea lo gloria en la iglesia en Cristo Jesús por todas las edades, por los siglos de los siglos. Amén.

Efesios 4: 17-21








1 comentario: